domingo, mayo 22, 2011

Presentan el libro "Machu Picchu: Canto de Piedra"

A manera de homenaje por el centenario del descubrimiento científico de la ciudadela inca de Machu Picchu, una empresa privada lanza la publicación "Machu Picchu: Canto de Piedra", un libro que destaca la leyenda y riqueza de la "Sétima Maravilla". "El libro busca mostrar no sólo el pasado, sino también el presente y el futuro de Machu Picchu. Hace una revisión de la historia e investigación arqueológica acerca de la magnífica ciudadela, desde los motivos de su construcción, hasta su primer avistamiento realizado por Hiram Bingham en 1911", citó Carlos Agualimpia, Vicepresidente de Marketing de Backus. El equipo responsable por esta publicación está compuesto por por los reconocidos arqueólogos Federico Kauffmann Doig y Elías Mujica, el escritor cusqueño Luis Nieto Degregori, entre otros entendidos en el tema, que acompañan sus apreciaciones con imágenes del famoso fotógrafo Martín Chambi. La obra se expondrá al público en general a través de una exposición de las mejores fotos del libro. Esta exposición está disponible actualmente en Lima en 9 estaciones del metropolitano, incluyendo la estación central y estará disponible en la ciudad del Cusco a partir del 8 de junio. Fuente: http://diariocorreo.pe

Especialistas explican sus teorías sobre el origen de Machu Picchu

El gran mausoleo de Pachacútec LUIS GUILLERMO LUMBRERAS. ARQUEÓLOGO. INVESTIGADOR DE LA CULTURA INCA, ENTRE OTROS TEMAS. “La hipótesis que manejamos es que Machu Picchu era un mausoleo. Creemos, y los documentos del siglo XVI así lo revelan, que era un santuario dedicado a los muertos. Especialmente a un muerto: Pachacútec, el gran gobernante que mandó construir el lugar. Las crónicas sostienen que allí había una cripta principal que guardaba esta momia que luego fue llevada por los españoles a Lima. Sostenemos esto, además, debido a que hay otras cinco criptas [no tumbas], cinco lugares donde se ha excavado en las rocas y se ha habilitado espacios para guardar momias. En tanto, consideramos que hay dos sectores del complejo donde la información es relativamente escasa, por lo que valdría poner atención en ellos. Uno queda al sureste del complejo. Allí hay cuatro inmensas casonas de dos pisos. Es la única zona residencial que se conoce. Consideramos que allí se debería excavar con mucho rigor. Otra zona está en la parte oriental. Allí hay un grupo de criptas muy elegantes, vacías ya para cuando llegó Hiram Bingham. No han sido exploradas porque están en una pendiente. La inversión que se requiere para poder intervenir eso es bastante fuerte. PREPARAR EL SITIO Respecto a la conservación, creo que hay que consolidar aquellas zonas que son motivo de visita intensa por parte de los turistas. Este era un santuario en el que la gente andaba prácticamente descalza. No más de 200 o 300 personas vivían ahí al servicio de él. La gente caminaba con mucho respeto. En cambio ahora adultos y niños corren, brincan… no podemos impedir que esto ocurra, ciertamente. Lo que hay que hacer es preparar el sitio, hacer tareas de consolidación de los elementos arquitectónicos que más están afectos a este tipo de circunstancias”. Ampliación de la frontera agraria FEDERICO KAUFFMANN. ARQUEÓLOGO. HA ESCRITO DIVERSOS LIBROS Y ARTÍCULOS SOBRE MACHU PICCHU. “Se habla de que Machu Picchu fue un palacio que mandó levantar Pachacútec. Esa teoría me desconcierta, es seguramente recogida de documentos del siglo XVII en que se dice que todas las edificaciones son palacios… los incas no tenían palacios, sino centros de administración. Estos, a su vez, eran sedes de culto. Para mí, Machu Picchu fue levantado, al igual que otros pequeños centros de toda esa comarca, bajo un proyecto estatal de los incas cusqueños para buscar ampliar su frontera agraria. Ello para enriquecer la alimentación de los habitantes de los Andes, para proveer el sustento de la población. Entonces, era un centro de administración para la producción de alimentos, además de sede de cultos y ceremonias dirigidas a propiciar buenas cosechas y a exorcizar las inclemencias climáticas como los fenómenos de El Niño, por ejemplo. Fue un experimento interesante, solo que se dio a última hora. NO DAR TODO POR SENTADO En cuestión de investigación se tiene que ir más allá. Está muy interesante que se diga que en tal recinto se emplearon 5.300 adoquines de piedra y que cada adoquín tenía tanto volumen. Pero hay asuntos más trascendentes. Además habría que investigar otras cosas que se dan por sentadas. ¿El Intihuatana fue un reloj solar? Una buena parte del año está nublado allí, llueve. ¿Qué sombra va a hacer?¿Qué iba a marcar? Hay otra cosa detrás de eso. Es un poco arbitrario pensar que era un reloj solar. En cuanto a preservación, creo que el problema es el turismo excesivo. Se deben ver nuevas estrategias para poder salvar el monumento de un deterioro, pero al mismo tiempo tenerlo abierto al público”. Nexo imperial entre los Andes y la selva alta FERNANDO ASTETE. ANTROPÓLOGO. JEFE DEL PARQUE ARQUEOLÓGICO DE MACHU PICCHU. “Fue un centro religioso, político y administrativo. Es lo que hoy sería una capital provincial, cuya función era la de administrar un gran territorio. Era el nexo entre los Andes y todo lo que es la selva alta. Se eligió el sitio por la gran diversidad de elementos que había alrededor. Así, de la sierra se intercambiaban los tubérculos y la carne de los camélidos sudamericanos. La selva daba coca, chonta, plantas medicinales. Además a Machu Picchu llegan entre seis y ocho caminos, es un nexo. Así, nosotros nos oponemos a teorías de arqueólogos norteamericanos que dicen que fue el ‘Camp David’ [zona de descanso del presidente de EE.UU.] de Pachacútec, o sea, su lugar de esparcimiento. ESTUDIOS NO CONCLUYEN NUNCA En relación a las investigaciones, falta mucho por esclarecer. ¿De dónde viene la cerámica? ¿Se ha elaborado cerámica en Machu Picchu o ha sido llevada para allá? Ya se sabe que allí se hacían objetos de metal, ¿cómo llegaba ese metal? ¿Era traído por comercio o explotado en el lugar? Igualmente se tiene que investigar algunos tipos de piedra hallados allí que no pertenecen al sitio. Si son del valle del Cusco o de los lugares cercanos… en verdad queda mucho por estudiar. En tareas de conservación, nos falta culminar obras de tratamiento de los elementos líticos. La lluvia hace que crezcan líquenes, algas, musgos que se adhieren fuertemente a las piedras. Se estudia la mejor manera de remover ello para que la vegetación no se apodere del complejo. Otra tarea pendiente es terminar de escanear todo el monumento para ver el estado de conservación de los pisos. Además, se necesitan laboratorios para conocer las dataciones, es decir, para saber a qué época pertenece cuál o tal objeto; también para conocer la calidad de los ceramios y mucho más. Sería ideal contar con uno de ellos, aunque sea en la ciudad del Cusco”. La importancia del estudio de los documentos MARIANA MOULD DE PEASE. HISTORIADORA DE LA CONSERVACIÓN CULTURAL DEL PERÚ. “Hay una línea de arqueólogos, que empieza con Hiram Bingham, que piensan que Machu Picchu fue construido para el inca Pachacútec. Hay otros que piensan que el complejo fue edificado en tiempos de Viracocha, que asumimos, es el padre de Pachacútec. La construcción del sitio se dio, posiblemente, para cumplir una función de culto, de respiro espiritual, un espacio sagrado del gobierno inca desde el Cusco, donde se hacían ceremonias religiosas. COMBINAR DISCIPLINAS Creo que lo que queda pendiente en relación a las investigaciones que se hacen de la historia de Machu Picchu es lograr que estas sean interdisciplinarias, es decir, estudios en los que se combinen la arqueología, la antropología y otras áreas. Hay que hacer mucha investigación histórica, insistir muchísimo en los documentos, en los papeles. La Universidad de Yale, y este dato está en el decreto supremo del año 1916, tiene que devolver los estudios que haya podido realizar Bingham. También hay que hacer investigación en los archivos coloniales, en los documentos administrativos que tenían los españoles sobre Machu Picchu. Asimismo, en el tema de la preservación, sería interesante brindarle al turista, que hace el esfuerzo de viajar desde lejos para ver los vestigios, información documentada y seria de lo que va a apreciar. Me parece bien hacer homenajes y festejos por el centenario, pero no hay que olvidar ser responsables con los datos que se brindan. Lo más importante para conservar el recinto es no sobrecargarlo, cuidar el flujo de visitantes. Hay que tener en cuenta que el sitio no es un circo, sino un lugar muy especial que sirve para enriquecernos históricamente, para empaparnos de identidad. Las estrategias deben plantearse con respeto. No es cuestión de meterlos a todos apachurrados”. Uso de técnicas modernas de investigación JULINHO ZAPATA. ARQUEÓLOGO Y ANTROPÓLOGO. HA REALIZADO ESTUDIOS Y EXCAVACIONES EN EL SITIO. Era un santuario religioso y un espacio de intercambio comercial. El primer punto se evidencia en el hecho de que allí existen 32 huacas. Además, el lugar está rodeado por apus tutelares y la Pacarina, que es un nevado de la cadena del Salcantay. El segundo punto tiene que ver con que allí se establecían relaciones entre la sierra y la selva. Se intercambiaban, por ejemplo, hachas de piedra y un conjunto de otros utensilios que se fabricaban en la sierra por coca, mujeres, plumas de aves exóticas, tabaco y otros tantos elementos de la Amazonía. Había un intercambio muy fluido entre ambos espacios. Creo que una tarea pendiente es usar las nuevas tecnologías para investigar, como las microscópicas y analíticas. La metodología que se usa hasta el momento no nos explica el sitio arqueológico. Con tecnología moderna se podrían obtener pruebas de las relaciones entre la sierra y la selva. También se podría determinar los lugares de donde proceden los productos encontrados allí. Podríamos hacer una investigación respecto de la nutrición de la gente que vivía allí en base al análisis de los huesos, del ADN y mucho más. Todavía falta mucho camino por recorrer en ese aspecto. DIVERSIFICAR ENTRADA Y SALIDA Ahora, para preservar el lugar, tenemos que seguir recuperando y creando drenes a fin de que fluya el agua de la lluvia. Además no hay que descuidar el tema del flujo de turistas. Hay que ampliar los lugares de ingreso y salida de Machu Picchu. Que no se suba y se baje por Aguas Calientes. Se podría entrar o salir por el kilómetro 122. Es importante diversificar

Backus presentó libro sobre Machu Picchu

(Aeronoticias).- Con motivo de los cien años del descubrimiento científico de Machu Picchu, en Cusco, Backus presentó una publicación de lujo, que incluye imponentes fotografías de la ciudadela incaica, una de las siete maravillas del mundo moderno. El libro Machu Picchu, canto de piedra ha sido editado por Walter H. Wust, quien destacó los variados detalles de Machu Picchu, que "han quedado impresos por siempre en nuestra memoria”. En el prólogo de la publicación del Grupo Backus, el presidente de la Cámara Nacional de Turismo (Canatur), Carlos Canales Anchorena, destaca que Machu Picchu es el espacio cultural y natural más emblemático de Perú. “Es el imán que atrae a visitantes del mundo entero a un destino exótico y lejano como el Perú, y realmente es una de las siete maravillas culturales de la humanidad”, agrega el dirigente gremial. Canales Anchorena señala que para un turista llegar a Machu Picchu es otorgarse un premio lleno de beneficios emocionales, “es obtener una recompensa única, de sensaciones y momentos que lo enriquecerán para siempre, que marcarán su vida y trazarán su historia”. La preservación de la riqueza ancestral, la sostenibilidad y el uso de la naturaleza llevan a un compromiso de difusión promoción y atraer aquellos turistas que buscan destinos únicos e irrepetibles, añade.

Machu Picchu: el santuario y sus tesoros naturales

El santuario histórico posee dos jardines botánicos poco conocidos. Entre las especies florales que más destacan se hallan hermosas orquídeas. El pequeño jardín botánico de Machu Picchu se pierde dentro de la ciudadela. A pesar de estar en un lugar céntrico, los turistas, apurados por sus guías, se detienen rara vez a observarlo. No saben lo que están omitiendo. Tiene 90 variedades de plantas y flores. Cincuenta de ellas son tipos de orquídeas. También hay yucas, palta, chirimoya y lúcuma. El jardín es una versión a escala de 15 metros x 3,5 metros de otro jardín más grande, ubicado fuera del sitio arqueológico. Ambos reúnen los ejemplares más representativos del Santuario Histórico de Machu Picchu, de 32.592 hectáreas. El primer lugar mencionado está a unos metros del templo de las tres ventanas, uno de los espacios más importantes del sitio que es considerado una de las Siete Nuevas Maravillas del Mundo. Julio Ochoa, biólogo del santuario, indica que es probable que esa área, en tiempo inca, haya sido usada para lo mismo que hoy, es decir, para exhibir la rica y diversa flora de la zona. En ese punto, Ochoa muestra una orquídea blanca, flor de un día. El nombre, evidentemente, señala la duración de su vida. Luego muestra el wakanki, una orquídea roja característica del santuario. Su nombre significa “vas a llorar”. Junto a esta está una orquídea lila llamada wiñay wayna. El complejo arqueológico del mismo nombre, el último antes de ingresar a Machu Picchu a través del Camino Inca, se llama así por esta flor. EL JARDÍN PERDIDO El experto trabaja también, desde el 2003, en el jardín botánico que se encuentra fuera de la ciudadela, específicamente al costado del museo de sitio, a 50 metros por un desvío del camino que sube desde Aguas Calientes hasta Machu Picchu, justo pasando el puente Ruinas. Es poco conocido porque los buses no van por el desvío. Si al lugar llegan 20 turistas al día, es un golpe de suerte. Allí hay 402 especies distintas de plantas. Pero quizá lo que más llama la atención sean las 123 variedades de orquídeas albergadas en el lugar (en todo el santuario hay 425 tipos). Ochoa camina y reconoce cada una sin leer el letrero que las identifica, ya sea con su nombre común o el científico. Las hay coloridas y llamativas. Largas y diminutas. Una, la ‘Pleuthattis revoluta’, tiene, en su mejor esfuerzo, el tamaño de un mosquito. “Mira estos helechos arbóreos –dice Julio mientras camina–, estas son plantas que han permanecido iguales desde el período jurásico”. Luego se detiene y señala: “Esta es la flor de Machu Picchu, la yuraq rup’u. Su nombre científico es ‘Andeimalva machupicchensis’”. Unos metros después para otra vez y señala a la orquídea más grande que hay: el zapatito de la ñusta (‘Phragmipedium caudatum’). Tiene de dónde sacarle el nombre: uno de sus pétalos luce como un zapato. Otros, más largos, llegan a medir hasta 70 centímetros. Parecen los pasadores. Así, rodeado por tanta vegetación, andenes y el río a unos metros, el jardín perdido de Machu Picchu parece una versión del edén. SEPA MÁS El peligro que significa el fuego Ada Castillo, jefa del Santuario Histórico de Machu Picchu, indica que el riesgo ecológico más grave para la flora y fauna en el santuario es la quema. Se conoce como quema a incendios causados por campesinos en sus parcelas para limpiarlas de maleza.

Machu Picchu alberga 42 especies de fauna únicas en el mundo

En el Santuario de Machu Picchu, ubicado en la provincia de Urubamba (Cusco), existen 42 especies de fauna únicas en su género a nivel mundial, de acuerdo al informe del biólogo Roberto Quispe García del Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Sernanp). Entre estas variedades destacan, por ejemplo, a nivel de las aves, el “Cucarachero Real”, entre roedores el "Lestoros Inca" y en el grupo de los reptiles una especie de víbora venenosa como la “Botros Andianus”, más conocida por la población como “Marianito”. Entre los grupos de mamíferos figuran los osos de anteojos. Se conoce, además, que de las 528 especies de animales, 423 son aves. “El Santuario de Machu Picchu, en sus 32 mil 500 hectáreas, no sólo cobija los vestigios de la arquitectura inca, sino que es poseedora de 2 mil 354 especies de flora, entre las que destacan orquídeas y plantas nativas como el Intimpa, la Llama Llama y el Aliso, cultivadas con fines de reforestación para poder recuperar el sistema afectado por incendios forestales en los últimos años”, culminó Quispe García.

Embellecerán pueblo de Machu Picchu con tejados andinos y pintado de fachadas

Las viviendas del centro del distrito de Machu Picchu y 12 de sus comunidades lucirán nuevos tejados y sus fachadas serán pintadas de color rojo andino, como parte del embellecimiento por el centenario del hallazgo de la ciudadela incaica, informó el alcalde de esta jurisdicción, Óscar Valencia Aucca. Tras precisar que sólo en Machu Picchu pueblo, como se conoce a la capital distrital, serán intervenidos 520 inmuebles, señaló que los arreglos comprenden también la reposición de dos puentes, el primero de cuatro metros de ancho por 120 de largo que colapsó con las lluvias en la zona de Collpani. El segundo es el puente Pantigoso, sobre el río Aguas Calientes, que sirve para el paso de los ciudadanos y turistas, cuya estructura data de hace 40 años. Este será cambiado por una infraestructura Bailey. Mencionó que cuentan con la infraestructura metálica para Collpani, que beneficiará a más de 500 familias de las comunidades de Huillcar, Collpani Grande, Igma y otras, incluido el distrito de Santa Teresa, por donde llegan turistas por la ruta alterna. La inversión para estas obras de embellecimiento suma un millón de nuevos soles, la cual, según dijo a la Agencia Andina, otorgó el Gobierno Central por medio del Ministerio de Vivienda. Los puentes, agregó Valencia Aucca, los entregará el Ministerio de Transportes y Comunicaciones. Esas obras también son apoyadas por el Fondo de las Américas. Asimismo, el sistema de electrificación será intervenido por la empresa Electro Sur Este S.A., que invierte 500 mil nuevos soles para mejorar la iluminación de la ciudad y entregará un transformador, dijo el burgomaestre. Por otro lado, mencionó que elaboran un proyecto para el tratamiento de la basura que deja la población y los turistas con apoyo de PeruRail. La iniciativa requiere una inversión de dos millones 800 mil nuevos soles. El alcalde manifestó que el objetivo es enfrentar de manera óptima el tiempo que resta para la fecha central de las celebraciones por el centenario del descubrimiento de Machu Picchu, prevista para el 7 de julio, y entregar un pueblo elegante y fraterno. Recordó que hasta 2004, la comuna recibía un presupuesto de tres millones de nuevos soles para atender los sectores salud, educación y gastos corrientes, y que gracias a la Ley 28100 perciben el diez por ciento de los ingresos a la ciudadela incaica, que suman entre seis y siete millones. “Eso hace que el presupuesto anual sea de 11 a 12 millones máximo, lo que es nada para atender una maravilla que recibe 2,500 turistas diarios, que tiene una población flotante de 12,000 personas y una fija de 6,000”, mencionó.

Investigadores que realizaron estudios en Machu Picchu serán reconocidos

Este lunes, en el marco de la conferencia ‘Aportes de la Comunidad Científica en los 100 años de Machu Picchu para el Mundo’, serán reconocidos 23 investigadores regionales y extranjeros en el auditorio de Gobierno Regional del Cusco, informó la subgerente de Recursos Naturales, Rosa Urrunaga. Este evento es impulsado por el Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado (Sernanp) y la Universidad Nacional San Antonio Abad. En el grupo de investigadores se rendirá homenaje póstumo a cinco científicos. Ellos son los botánicos César Vargas Calderón y Fortunato L. Herrera, el zoólogo Ismael Zevallos Bendezú, así como al Dr. David Bennett. y al Dr. Eric Christenson. Las otras 19 personalidades pertenecen a la Comunidad Científica de la Tricentenaria Casa de Estudios Superiores del Cusco, quienes realizaron trabajos sobre la flora, fauna y el ecosistema del santuario de Machupicchu. Esta actividad se efectuará dentro de las celebraciones del ‘Día Mundial de la Biodiversidad’. Actualmente en las 32 mil hectáreas del santuario de Machupicchu se alberga 2 mil 534 especies de flora y 528 de fauna, de las cuales 42 son únicas en su especie.